dc.description.abstract | El Fideicomiso 248 MAG – BNCR, conocido como Proyecto para Pequeños Productores de la Zona Norte (PPZN), cumplió en el 2007 quince años de apoyar con crédito dirigido a los agricultores y ganaderos de los cantones de Upala, Guatuso, Los Chiles y los distritos de Pocosol y Cútris del cantón de San Carlos, en la provincia de Alajuela, Costa Rica. El presente trabajo se concentró en aplicar a este Fideicomiso una Evaluación de Impacto al periodo comprendido entre el año 1994 y el 2004, para determinar la variación en el nivel de vida de un grupo de productoras y productores del Asentamiento Campesino de El Valle, en el distrito de Buena Vista del cantón de Guatuso. Los resultados mostraron que el PPZN pudo establecer un impacto positivo con el cambio del usufructo de las parcelas, dado que más del 75% de los entrevistados afirmaron que ahora producen con sus propios recursos contra un 59.4% que no lo hacía antes del financiamiento, de igual forma el crecimiento del patrimonio agropecuario familiar pudo ser constatado por el 79% de estas personas. Con respecto a la capacidad de ahorro, un efecto positivo pudo ser confirmado por un 88% de los entrevistados que aseguraron haber abierto una cuenta de ahorro posterior al financiamiento, la cual mantienen activa. Cuando se pregunta por la capacidad de invertir en nuevos proyectos agropecuarios un 72% de los interrogados indicaron estar en la capacidad de volverlo a hacer con un crédito igual y la suma de sus propios recursos. Otros impactos positivos se dieron en la cobertura de la capacitación, la cual beneficio al 75% de los consultados, de estos un 87% aseguró haber puesto en práctica sus nuevos conocimientos y un 88% manifestó que sus nuevos conocimientos mejoraron y facilitaron su forma de producir y con la asistencia técnica un 79% de los interpelados revelaron que las recomendaciones técnicas fueron acertadas y se acataron. Positivo fue también el impacto producido por el seguimiento dado a la recuperación de los créditos, en este caso un 87% de los beneficiarios recibió una visita para este efecto y de ellos un 71% afirmó haber recibido una opción de arreglo de pago ajustada a su situación.
Se analizó el comportamiento de la cartera de crédito del periodo de estudio y se observó que la colocación histórica, que son todos los préstamos formalizados (vigentes, cancelados, atrasados o en cobro) alcanzó ¢763.567.475, por otro lado la cartera actual del periodo, que son todos los préstamos con saldos (vigentes, vencidos o en cobro) logró ¢276.718.475, el monto promedio de los préstamos fue de ¢914.510,78. El número de préstamos del periodo fue de 1.241 y el número de beneficiarios alcanzó las 615 familias. En cuanto a la Morosidad de la Cartera, que se define como el total de préstamos vencidos entre el total de préstamos de la cartera actual, esta promedió un 40%, en el caso de la Morosidad Financiera Real la cual se calcula dividiendo el monto vencido de la cartera entre el saldo de la cartera actual, su promedio fue de un 25%. Cuando se analizó la colocación por género se encontró que el 89% del monto de las colocaciones favoreció a hombres y un 11% a mujeres. El rubro más contratado fue la ganadería, que concentró el 58% de los recursos de crédito. Cuando se analizó la distribución de
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los préstamos según rango de ingresos, las y los productores con entradas económicas anuales de entre $1.001 y $1.500 se beneficiaron con el 50% de los préstamos. Con respecto a cómo se distribuyó el financiamiento desde la perspectiva de la tenencia de la tierra, fueron los propietarios de parcelas del IDA los que se ocuparon el 76% de los préstamos. Por último el análisis mostró que en este periodo de estudio los propietarios de terreno con extensión comprendida entre tres y siete hectáreas fueron los más favorecidos con los recursos del PPZN ocupando el 34% de estos. | es_CR |